El desprecio es una palabra fuerte, que puede llegar a preocuparnos mucho, ya que es muy común que ésta provoque dolor. Existen distintos tipos de desprecio. Es muy importante el desprecio de la sociedad, que es el que probablemente a veces nos preocupa más, ya que hay personas para las cuales es muy importante encajar dentro de algún grupo social, o sólo ser aceptado por los demás. Otro tipo de desprecio es cuando quieres a alguien y ese alguien no te corresponde, es muy complicado sobrevivir ante este sentimiento, ya que suele ser doloroso.
Pero hay algo muy importante, la gente suele ser muy cruel con las personas que son “diferentes” ya sea en físico, o en la manera de pensar, y es que las personas en general, le tienen miedo al cambio y se sienten amenazados frente a la gente que tiene distintas ideas o viste de manera diferente, sin embargo lo más importante no es lo que se ve por fuera, sino lo hay por dentro, lo que uno vale como persona , y lo que lo hace ser, es decir su personalidad, su esencia ; no importa lo que los demás piensen sobre ti, siempre y cuando seas tú mismo y eso te haga sentir bien. Respecto a cuando no te corresponde aquella persona especial hay que pensar en que no sabe ver lo que eres por dentro y lo que realmente vales, sin embargo las cosas pasan por algo y cuando una puerta se cierra, muchas se abren, no debe importarte tanto el que te rechacen siempre habrá alguien que te querrá por la persona que eres sin importar tus defectos.
Lo opuesto al amor es la indiferencia. Sé que nosotros pensamos que es el odio, pero te has puesto a pensar que lo peor que pueda existir es la indiferencia hacía una persona porque cuando sientes odio, lo que se hace es darle importancia a las acciones de las demás personas y estamos pendientes de lo que hacen. Muchas veces este odio se convierte en amor como suele suceder entre dos personas que se odian y terminan siendo novios o mejores amigos; así es como empiezan las buenas relaciones. Pero la indiferencia y el desprecio ante cierta persona causan un gran dolor como ya lo mencionamos y sólo les deseamos que nunca sean indiferentes ni desprecien a las personas que los quieren y los aprecian porque realmente les harán una gran herida en el corazón.
Escritoras:
Nora Denisse Peláez Reyes
Cristina Herrera Méndez
Editora:
Celia María Castro Vásquez.
jueves, 26 de marzo de 2009
jueves, 19 de marzo de 2009
El enojo
¿Por qué no haces las cosas bien? Es que nunca haces lo que te digo, siempre haces lo que quieres; estas frases entre muchas más son enunciados clásicos cuando estamos enojados o molestos con alguien o con nosotros mismos. Pero ¿qué es el enojo? Éste es un sentimiento que experimentamos cuando no estamos en acuerdo con algo o alguien y queremos que las cosas se hagan a nuestra manera y a nuestra forma de pensar. Como seres humanos queremos tener siempre la razón y creemos que lo que pensamos es lo correcto, pero hay veces que nos equivocamos y estamos en un grave error. Tenemos que aprender de las demás personas ya que de esta manera podemos obtener distintas perspectivas del mundo.
Existen diversas maneras de prevenir o de minimizar el enojo pero muchas veces nuestro sentimiento es más fuerte que cuando estamos pasando por este momento decimos o hacemos cosas que realmente no queremos hacer como: gritarle a una persona que apreciamos demasiado, decirle a alguien que ya no lo queremos, que es un idiota, que no sirve para nada, que nada de lo que hace es conveniente, entre muchas otras más.
Pero este sentimiento no nos trae nada bueno. Como sabemos este tipo de sentimiento es negativo que, si lo tenemos en nuestro ser, no nos va a traer cosas buenas, al contrario va a causarnos conflictos en nuestras relaciones sociales ya que las demás personas nos verán con ojos de miedo o no querrán establecer contacto con nosotros por nuestra manera de ser y de actuar.
El mejor concepto para un ser humano es ser alegre, tener felicidad, ser confiable, ser optimista; en cambio una persona seria, dura e insensible a los sentimientos de las demás personas, no nos va a inspirar confianza ni nos va a motivar a ser una amistad de ella. Por eso debemos de echar a un lado este sentimiento ya que como dice el dicho “el que se enoja, pierde”.
ligas
www.cya.net/salud/?ContentID=510
www.aishlatino.com/inspirado/crecimiento/El_Enojo_El_-Maestro-_Interno.asp
Escritora
Cristina Herrera
Editoras
Nora Denisse Peláez
Celia María Castro
Existen diversas maneras de prevenir o de minimizar el enojo pero muchas veces nuestro sentimiento es más fuerte que cuando estamos pasando por este momento decimos o hacemos cosas que realmente no queremos hacer como: gritarle a una persona que apreciamos demasiado, decirle a alguien que ya no lo queremos, que es un idiota, que no sirve para nada, que nada de lo que hace es conveniente, entre muchas otras más.
Pero este sentimiento no nos trae nada bueno. Como sabemos este tipo de sentimiento es negativo que, si lo tenemos en nuestro ser, no nos va a traer cosas buenas, al contrario va a causarnos conflictos en nuestras relaciones sociales ya que las demás personas nos verán con ojos de miedo o no querrán establecer contacto con nosotros por nuestra manera de ser y de actuar.
El mejor concepto para un ser humano es ser alegre, tener felicidad, ser confiable, ser optimista; en cambio una persona seria, dura e insensible a los sentimientos de las demás personas, no nos va a inspirar confianza ni nos va a motivar a ser una amistad de ella. Por eso debemos de echar a un lado este sentimiento ya que como dice el dicho “el que se enoja, pierde”.
ligas
www.cya.net/salud/?ContentID=510
www.aishlatino.com/inspirado/crecimiento/El_Enojo_El_-Maestro-_Interno.asp
Escritora
Cristina Herrera
Editoras
Nora Denisse Peláez
Celia María Castro
sábado, 14 de marzo de 2009
jueves, 12 de marzo de 2009
La Depresión
La depresión
¿Algunas vez has sentido que nadie te quiere, que todo lo que vez no tiene color, y que una nube gris siempre te persigue? Parece ser que todos sin excepción hemos llegado a vivir esta experiencia tan conocida llamada depresión. Pero, ¿qué es la depresión?
La depresión es un estado de ánimo que llega a convertirse en un trastorno emocional que se demuestra por un abatimiento e infelicidad, el cual puede ser transitorio o permanente.
Pero, ¿cómo sabes que estas pasando por esta situación? Hay diversas maneras de identificar la depresión; muchas veces lo demuestras con al falta de ánimo y de apetito. Otra manera puede ser comiendo mucho o en casos excesivos, sintiendo el deseo de arrebatarse la vida. Pero, ¿por qué se llega a este estado de ánimo? Las razones principales puede ser: la perdida de un ser querido, ya sea por la muerte de alguien o el abandono; problemas familiares; el rompimiento con tu pareja, calificaciones bajas o simplemente porque te sientes solo, sin rumbo, sin ganas de seguir, etc. Cuando te sientas así, lo más importante es que te des cuenta de que no estás solo y que tienes amigos y familiares que te quieren y que seguramente están dispuestos a ayudarte. Algo muy importante que debemos de considerar es que no hay que dejarnos vencer por este sentimiento.
Otra cosa de gran relevancia es el hecho de que aunque veamos que las puertas se nos cierran, no significa que necesariamente sea así y que todo depende del cristal con que se mire, pues siempre es bueno sacar los sentimientos que llevamos dentro y llorar para desahogar las penas que nos aquejan. El llorar nos ayuda, como también el sentarnos a comer chocolate, etc., pero todo con medida. Recuerda que después de una caída hay que volverse a levantar; recuerda que por cada puerta que se cierra, otra se abre.
Ligas de blogs relacionados:
http://maxfigue.blogspot.com/2008/01/depresin.html
http://blogpsiquiatria.blogspot.com/2007/08/depresin.html
Escritoras:
Celia María Vázquez
Cristina Herrera Méndez
Editora:
Nora Denisse Peláez
¿Algunas vez has sentido que nadie te quiere, que todo lo que vez no tiene color, y que una nube gris siempre te persigue? Parece ser que todos sin excepción hemos llegado a vivir esta experiencia tan conocida llamada depresión. Pero, ¿qué es la depresión?
La depresión es un estado de ánimo que llega a convertirse en un trastorno emocional que se demuestra por un abatimiento e infelicidad, el cual puede ser transitorio o permanente.
Pero, ¿cómo sabes que estas pasando por esta situación? Hay diversas maneras de identificar la depresión; muchas veces lo demuestras con al falta de ánimo y de apetito. Otra manera puede ser comiendo mucho o en casos excesivos, sintiendo el deseo de arrebatarse la vida. Pero, ¿por qué se llega a este estado de ánimo? Las razones principales puede ser: la perdida de un ser querido, ya sea por la muerte de alguien o el abandono; problemas familiares; el rompimiento con tu pareja, calificaciones bajas o simplemente porque te sientes solo, sin rumbo, sin ganas de seguir, etc. Cuando te sientas así, lo más importante es que te des cuenta de que no estás solo y que tienes amigos y familiares que te quieren y que seguramente están dispuestos a ayudarte. Algo muy importante que debemos de considerar es que no hay que dejarnos vencer por este sentimiento.
Otra cosa de gran relevancia es el hecho de que aunque veamos que las puertas se nos cierran, no significa que necesariamente sea así y que todo depende del cristal con que se mire, pues siempre es bueno sacar los sentimientos que llevamos dentro y llorar para desahogar las penas que nos aquejan. El llorar nos ayuda, como también el sentarnos a comer chocolate, etc., pero todo con medida. Recuerda que después de una caída hay que volverse a levantar; recuerda que por cada puerta que se cierra, otra se abre.
Ligas de blogs relacionados:
http://maxfigue.blogspot.com/2008/01/depresin.html
http://blogpsiquiatria.blogspot.com/2007/08/depresin.html
Escritoras:
Celia María Vázquez
Cristina Herrera Méndez
Editora:
Nora Denisse Peláez
jueves, 5 de marzo de 2009
Los celos
“El celoso ama más, pero el que no lo es ama mejor.”
Molière (1622-1673) Comediógrafo francés.
Los celos en la pareja son un sentimiento de inseguridad generado por un miedo natural a la pérdida, generalmente basado en la falta de confianza. Sin embargo, esto no significa que sea considerado una emoción perjudicial en la relación de pareja, puesto que es común temer a la falta de la persona amada.
Dentro de una relación es posible observar la gran diferencia que hay entre los celos sanos y lo patológicos. Los celos sanos consisten en una preocupación moderada por la posible pérdida de la pareja, mientras que los celos patológicos están acompañados de intensos sentimientos de inseguridad, auto-compasión, hostilidad y depresión y suelen ser destructivos para la relación. A la larga los celos permanentes tienden a desgastar y perturbar la relación afectiva, porque surge el reproche, el reclamo, la exigencia de incondicionalidad hacia el ser querido.
Algunas de las creencias que llegan a acrecentar los celos son tan comunes como el pensar que el amor no se está correspondiendo en la misma medida (“No me quiere como yo a ella”), que la felicidad de ambas partes se basa en su relación (“No sé qué haría si me deja”), etc.
Es importante saber que en una relación ambas personas deben poner de su parte y que una relación se basa principalmente en la confianza, y si bien los celos son buenos de vez en cuando y con medida, mucha medida, tenemos que aprender a controlarnos ya que la mayoría de las veces los celos perjudican una relación, debes creer en ti mismo(a) y saber que la otra persona está contigo porque te quiere y no hay razón para tener celos.
En general son malos cuando rebasan los celos normales porque chocan a la pareja, una persona celosa, tiende a ser insegura y altamente posesiva y esto definitivamente no es muy agradable para nadie.
Escritoras:
Celia María Vázquez
Cristina Herrera Méndez
Editora:
Nora Denisse Peláez
Ligas de blogs relacionados
http://celosenfermizos.blogspot.com/
Bibliografía
Recuperado el 5 de marzo del 2009 de: http://www.cepvi.com/articulos/celos.shtml
Recuperado el 5 de marzo del 2009 de: http://www.vivirenpareja.cl/pages/reportajes/los%20celos.htm
Molière (1622-1673) Comediógrafo francés.
Los celos en la pareja son un sentimiento de inseguridad generado por un miedo natural a la pérdida, generalmente basado en la falta de confianza. Sin embargo, esto no significa que sea considerado una emoción perjudicial en la relación de pareja, puesto que es común temer a la falta de la persona amada.
Dentro de una relación es posible observar la gran diferencia que hay entre los celos sanos y lo patológicos. Los celos sanos consisten en una preocupación moderada por la posible pérdida de la pareja, mientras que los celos patológicos están acompañados de intensos sentimientos de inseguridad, auto-compasión, hostilidad y depresión y suelen ser destructivos para la relación. A la larga los celos permanentes tienden a desgastar y perturbar la relación afectiva, porque surge el reproche, el reclamo, la exigencia de incondicionalidad hacia el ser querido.
Algunas de las creencias que llegan a acrecentar los celos son tan comunes como el pensar que el amor no se está correspondiendo en la misma medida (“No me quiere como yo a ella”), que la felicidad de ambas partes se basa en su relación (“No sé qué haría si me deja”), etc.
Es importante saber que en una relación ambas personas deben poner de su parte y que una relación se basa principalmente en la confianza, y si bien los celos son buenos de vez en cuando y con medida, mucha medida, tenemos que aprender a controlarnos ya que la mayoría de las veces los celos perjudican una relación, debes creer en ti mismo(a) y saber que la otra persona está contigo porque te quiere y no hay razón para tener celos.
En general son malos cuando rebasan los celos normales porque chocan a la pareja, una persona celosa, tiende a ser insegura y altamente posesiva y esto definitivamente no es muy agradable para nadie.
Escritoras:
Celia María Vázquez
Cristina Herrera Méndez
Editora:
Nora Denisse Peláez
Ligas de blogs relacionados
http://celosenfermizos.blogspot.com/
Bibliografía
Recuperado el 5 de marzo del 2009 de: http://www.cepvi.com/articulos/celos.shtml
Recuperado el 5 de marzo del 2009 de: http://www.vivirenpareja.cl/pages/reportajes/los%20celos.htm
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